Acabo de ver una de las mejores entrevistas que puede presentar la televisión abierta. Jordi Évole entrevistó en el programa "Eso que tú me das", a Pau Donés, a dos semanas de su fallecimiento por cáncer colonorectal.
No soy melómano. Me gusta Jarabe de Palo por innovador y diferente. También por directo, sencillo y repetitivo. Su alma, Pau Donés, que en paz descanse, era un gran ser humano y un gran músico. Con él se puede creer en la creatividad sencilla y natural que nace de la experiencia de la vida y no del rebuscamiento.
El primer reconocimiento es para el gran entrevistador Jordi Évole. Dejó y dejó hablar a Donés. La madeja de la conversación se iba deshilando de la forma más natural y agradable posible.
Y luego se podía descubrir al Pau Donés creyente, no en Dios según dijo, pero sí en la vida, en la familia, en la música, en el profesionalismo, en la naturaleza, en la medicina, en el personal médico, en la historia.
En medio de tanta incertidumbre y noticias negras, este gran ser humano y músico transmitía esperanza y ganas de vivir con una sonda en la nariz, una pérdida de más de 25 kilos y a dos semanas de su muerte.
Y claro, te preguntas: y esa esperanza “de qué depende”. Y te llega la respuesta: “es que todo me parece bonito”.
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